La retina es una fina capa de tejido sensible a la luz la cual es responsable de captar las imágenes que llegan al ojo, cubre las ¾ partes de la pared interna del globo ocular, y está compuesta por células receptoras de la luz (fotorreceptores) y por células que transmiten la energía eléctrica al cerebro (neuronas) a través del nervio óptico. La zona de máxima resolución visual de la retina se denomina macula.

Son diversas las enfermedades que pueden afectar a la retina, y el tratamiento de las mismas puede variar entre medicamentos, procedimientos con láser y/o cirugía. El láser es un tratamiento muy importante en las enfermedades retinianas y puede abarcar patologías como el desprendimiento de retina, degeneración macular, rupturas retinianas y trombosis venosas.
El tratamiento quirúrgico de las patologías de la retina se basa en 2 técnicas: la cirugía escleral y la vitrectomía.